Con este titulo transcribimos excelente artículo que nos hace recordar el gran papel desempeñado, en el mundo, por la Madre Teresa de Calcuta y el médium minero Francisco Candido Xavier.

Los dos nacieron en el año de 1910. Ella, Teresa, en Albania. El, Chico, en Pedro Leopoldo, Minas Gerais.

Ella, católica. El, espírita. Sin embargo, ambos se comportaban como auténticos integrantes de la familia universal.

Tenían mucho más en común que apenas el año de nacimiento.

Su maestro era el mismo, Jesus. Tenían el mismo sobrenombre, amor. Nacieron con el mismo objetivo, servir. Ella fue laureada con el Premio Nobel de la Paz. El vivió pacíficamente toda su vida.

Teresa de Calcuta vivió para los menos favorecidos. Quería ser pobre pero nunca lo consiguió.

Su corazón transbordaba las riquezas de la nobleza, de la generosidad, como perlas de fraternidad o diamantes da solidariedad.

Ella decía, con toda su simplicidad, que la felicidad humana es imposible de ser medida.

Como controlar en planillas estadísticas la felicidad de un hambriento que encuentra el alimento?

Ella tenía razón. Es imposible hacer mediciones de la felicidad humana. Por eso, trabajaba sin estadísticas, pero en pos de la felicidad y dignidad de sus hermanos de camino.

Chico Xavier, de Brasil, el minero del siglo, también quería ser pobre, pero no tubo suceso.

Donó los derechos de autor de sus más de cuatrocientos libros psicografados, que vendieron y continúan vendiendo millares de ejemplares en todo el mundo.

Podría haber tenido una buena cuenta bancaria. Prefirió la simplicidad. Pero nunca fue pobre. Su vida fue repleta de amigos de los dos planos de la vida.

Chico era y será, donde esté, un millonario, un magnate de las letras, un ícono de la humildad, un pobre de las monedas, pero rico de amor...

Cuentan que quien se aproximaba de Madre Teresa de Calcuta no podía contener la emoción, debido a la irradiación de su serenidad y su intensa energía espiritual.

Aquellos que convivieron con Chico afirman que su presencia iluminaba, calmaba, tranquilizaba.

Chico y Teresa. Teresa y Chico. Parece que hablamos de amigos:Hola, Teresa! Buen día, Chico!

Aún los que no los conocimos personalmente los sentimos como amigos.

Hablar de sus conquistas, realizaciones y aventuras es como hablar al respecto de amigos, porque entre amigos no hay barreras, inquietudes o reservas.

Teresa y Chico eran amigos del mundo, de los ricos, de los pobres, de los brasileros, indios, nigerianos, amigos de todos...

Teresa de Calcuta y Chico de Brasil dejaron marcas inolvidables e imborrables. Ambos practicaban el amor.

La invitación que nos dejaron es que, dentro de nuestras posibilidades, vivamos como ellos, sirviendo y amando para la construcción de un mundo más justo y fraterno.

Pensemos en esto!

Redacción del Momento Espírita, con base en el articulo Teresa
de Calcuta, Chico de Brasil, de autoría de Wellington Balbo, de
Bauru/SP, publicado en la Revista Espírita bimensual de
 la Comunhão Espírita Cristã de Lisboa, Portugal,
de mayo/junio/2009.
En 13.09.2010.