Momento Espírita
Curitiba, 18 de Abril de 2024
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ícone ¡Buenos días!

Al iniciarse un nuevo período de tiempo, en el que el Creador permite despertar para actuar en el bien, es importante meditar sobre la bendición de este día en la construcción de la alegría y de la paz tan deseadas.

No se importe si el día ha amanecido nublado o lluvioso, con sol o borrascoso; no se preocupe si el clima está frío o si el calor promete castigar.

Levántese y rece, agradeciendo a Dios el hecho de haber abierto los ojos en el cuerpo físico para un nuevo día... Ello es una ocasión de realizaciones positivas, de progreso para usted.

No se impaciente por darse cuenta de que, en el día de hoy, usted guarda muy poco o ningún dinero para sus necesidades comunes.

Piense que está con salud, y que el trabajo, por más simple que sea, es la feliz oportunidad que la persona recibe de Dios para modificar la vida.

Ya sea trabajando la tierra o recolectando basura, preservando la higiene; ya sea lavando ropa o cargando fardos, sea el trabajo que sea,  agradezca al Señor, y siga adelante.

Trate de no sentirse infeliz si se ha despertado con fiebre, debilitado, enfermo. Usted mantiene la lucidez, puede pensar, puede actuar. Busque el socorro de alguien, si no puede cuidarse solo.

No desprecie la oración con que usted pedirá la ayuda divina ante su desequilibrio orgánico. La ayuda vendrá. Espere, actuando.

Sea como sea, usted tiene ahora en sus manos los más valiosos recursos para ser feliz, dentro del marco de sus pruebas y merecimientos.

No se entregue a la rebeldía, al rencor, al disgusto, al desaliento. Su día debe ser un día lindo; su tiempo debe ser bendito.

Mientras es el día de hoy, sea amigo de alguien,  leal y atento.

Mientras es el día de hoy, libérese de los vicios que lo aprisionan, fiel al bien, decidido.

Mientras es el día de hoy, crezca un poco más, vinculado a Jesús Cristo, para que consiga vivir un buen día, cada día que pase por usted.

Viviendo bien su día, usted se estará preparando para el hermoso día sin nubes, sin tormenta, sin noche, que el Creador a todos nos ofrece, después de superar los tiempos terrestres, educándonos y valorando las horas, con disposición y coraje, con grandeza de alma. 

*** 

Mientras pueda escuchar o percibir la palabra “hoy”, con la audición o con la reflexión, en el campo fisiológico, válgase del tiempo para registrar las sugerencias divinas y concretarlas en su marcha.

 

(Cap. 31 del libro “Nossas Riquezas Maiores” Editorial  Fráter Livros Espíritas.Brasil)

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